Para Kelvin King, socio fundador de Valuation Consulting, “el capital intelectual se reconoce como el activo más importante que poseen muchas de las empresas más grandes y poderosas del mundo; para dichas empresas, el capital intelectual es la clave de su dominio del mercado y de su rentabilidad continua.”[1] Sin embargo para el especialista a pesar de esto, “las empresas aún no toman plena conciencia de la función de los derechos de Propiedad Intelectual (En adelante P.I)”.[2]
Y es que al parecer en muchas ocasiones las empresas piensan que el valor total de una empresa se refleja en sus utilidades dentro de su contabilidad, es decir sus ganancias, y cerradas tratando de incrementar estas o bien de mantenerlas, primordialmente se concentran en los gastos de operación, atención al cliente, publicidad etc. y dejan descuidada esta parte tan importante, “cuando en general, las normas de contabilidad no reflejan la importancia de los derechos de P.I. y de los activos intangibles en las cuentas de una empresa y, a menudo, estos derechos son subestimados, mal administrados o explotados de manera insuficiente.”3
Para darnos una idea clara del valor de una empresa, podríamos pensar en la compañía más grande del mundo Alphabet, mejor por conocida por su marca “Google”, se estima que actualmente el valor de la empresa es por 420, 000 millones de dólares y ha superado a grandes firmas como Apple.[3]
El éxito de la empresa Alphabet, se basa en “Google” como todos lo sabemos un buscador en internet, vaya algo tangible que ni siquiera podemos tocar; si nos pusiéramos a pensar, que pasaría si la marca no hubiera sido registrada, ¿el éxito de Google hubiera sido el mismo? ¿Y por consecuencia el valor de la empresa Alphabet sería el mismo?.
Probablemente son interrogantes que lógicamente podemos contestar, pensando en que “una marca es un signo visible y su función principal es distinguir productos y servicios en el mercado de otros de su especie”[4], de ahí que parte de su éxito de la empresa Alphabet, se debió a registrar la marca “Google” de tal forma que impidió a empresas que ofrecían un servicio similar, ingresaran al mercado una marca con una denominación o un diseño igual o semejante que hubiera podido confundir al público consumidor; adicional a que la empresa Alphabet, si no hubiera registrado la marca y protegido de la mayor forma jurídicamente posible, es muy probable que algún tercero tratando de realizar un competencia desleal la hubiera registrado y el éxito de la empresa no hubiera sido el mismo.
[1] Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI o WIPO), Disponible en línea: http://www.wipo.int/sme/es/documents/value_ip_intangible_assets.htm, consultado el 12 de abril de 2016.
[2] Idem. 3 Idem.
[3] Disponible en línea: http://www.elmundo.es/economia/2016/01/22/56a27424268e3e736f8b4638.html, consultado el 12 de abril de 2016.
[4] Artículo 88 de la Ley de la Propiedad Industrial.